El edén infinito y salvaje de África

Si hace tiempo que quieres descubrir el continente africano y conocer la cultura y la magia que se esconden detrás de él, te recomendamos que tu próximo destino sea Tanzania.

Un lugar de ensueño donde disfrutar de las verdes llanuras, los cielos infinitos y el espectáculo de la vida salvaje, como si de una película se tratase. Por eso mismo es el mejor lugar donde realizar un safari fotográfico. 

Sin olvidarnos de la cálida acogida de su gente. Algo que sin duda recordarás de este viaje, por la cordialidad y belleza de sus diferentes culturas y sobre todo por la esencia de la civilización Masai.

Al ser un destino desconocido y lejano creemos que la mejor manera de viajar a Tanzania es hacerlo de forma guiada, privada y a medida. Por eso hoy queremos hablarte de algunos de los lugares más especiales que se esconden en este país y los alojamientos más lujosos que cautivarán tus sentidos.

Si te gusta la aventura, lo salvaje y lo desconocido, quédate a leer este artículo porque querrás que en tu próximo viaje te llevemos hacia Tanzania.

El viaje empezará una vez aterricemos en el aeropuerto del Kilimanjaro. Te recomendamos viajar de noche para llegar a la mañana siguiente y directamente poner rumbo a Arusha, la capital donde se organizan la mayoría de los safaris fotográficos. Allí podrás alojarte y descansar durante el resto del día, o bien seguir la ruta y poner rumbo a la zona más rural, donde nos adentraremos en territorio Masai y empezaremos a ver pequeñas aldeas.

El primer sitio que visitaremos será el Parque Nacional del Lago Manyara, que está ubicado en el Valle del Rift, unas tierras fértiles y ricas en naturaleza y con unas vistas increíbles. Además, el lugar perfecto para hacer el primer safari, ya que es el hogar de una diversidad de vida salvaje. Podremos ver multitud de aves y flamencos, hipopótamos refrescándose en sus aguas, grandes búfalos, elefantes o jirafas y a los conocidos leones trepadores, a los que les encanta vivir en lo alto de los árboles y avistar a sus presas para lanzarse sobre ellas.

Para acabar el día nos alojaremos en Escarpment Luxury Lodge, a 5km del Lago Manyara, donde podremos disfrutar de unas vistas preciosas del Gran Valle del Rift. Este alojamiento está integrado en medio de la selva africana y ofrece unas vistas impresionantes del lago. Cuenta con 16 lujosos chalets privados y cada uno de ellos tiene su terraza privada con la que disfrutar de las vistas y de la vida silvestre. Además, los chalets están totalmente integrados con la naturaleza del bosque, por lo que vives una inmersión total en el espacio.

El segundo sitio que no podemos perdernos durante este viaje es el cráter del volcán Ngorongoro. Un cráter de 20km de diámetro interior declarado como patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Está extinguido desde hace millones de años y se dice que antes de que estallara había sido hasta más alto que el Monte Kilimanjaro.

Actualmente, el cráter Ngorongoro se ha convertido en un santuario natural para una de las poblaciones de animales más densas de África. Y el único lugar donde podremos encontrar a los “Big Five” o cinco grandes, es decir, a los animales más buscados: elefantes, leones, rinocerontes, leopardos y búfalos. Aunque hay mucha más vida salvaje, como hipopótamos o hasta 400 especies de aves como los flamencos, que los encontraremos bañándose en el lago Makat. Un lago que se ha formado en el fondo del cráter por el agua de la lluvia.

Después de esta experiencia para la vista y los sentidos, podremos alojarnos en un sitio que te encantará. En el The Highlands Ngorongoro dormirás en unas cúpulas de diseño geodésico en la cima del cráter Olmoti, a unos 25 minutos al norte del cráter Ngorongoro. Estas cúpulas te permitirán disfrutar de las mejores vistas al atardecer, anochecer y amanecer. Dormir en este lugar es el sueño de cualquier persona.

El tercer sitio que visitaremos es el Parque Nacional de Tarangire, considerado uno de los más bonitos del país y menos masificado que el de Serengeti. Tiene este nombre por el río que transcurre por sus valles, el río Tarangire.

Podremos disfrutar de un safari en un paisaje de montaña y repleto de baobabs, un árbol muy típico de la sabana de África. Cuenta con 2.600km2 de territorio donde encontraremos una abundante vida salvaje.

Además, es uno de los pocos lugares donde tendremos la oportunidad de ver a especies que son muy difíciles o casi imposibles de encontrar en otros parques, como son los antílopes. En este caso podremos ver el gerenuk, el pequeño kudú, el oryx, el alce y el gran kudú.

Pero sobre todo en este parque disfrutarán los amantes de los elefantes. Ya que a escasos metros de ti estarán dándose un baño o pastando. Les encanta comer baobabs, porque estos árboles tienen un alto contenido de agua en la corteza.

A la hora del descanso, esta vez nos alojaremos en el Sanctuary Swala, ubicado en una área apartada del Parque Nacional de Tarangire. En medio de la sabana africana y entre acacias gigantes están los doce lujosos pabellones de lona donde dormiremos. Es un campamento ecológico que respeta el medio ambiente y donde verás deambular a algunos elefantes.

Y por último, uno de los sitios más especiales para ver en Tanzania es el Parque Nacional de Serengeti. ¿Quién no ha oído hablar sobre este lugar? Posiblemente sea el lugar donde nacieron los safaris fotográficos. Un territorio de 14.763km2 que hace frontera con el Masai Mara de Kenia.

El nombre de Serengeti significa “llanura sin fin” en la lengua masai, y creemos que no tiene mejor descripción que esa. Es un espectáculo para la vista y los sentidos. Y es una experiencia que no se puede describir con palabras, simplemente hay que vivirla.

Para terminar con los alojamientos, esta vez pasaremos la noche en un lugar muy especial: el Four Seasons Safari Lodge. Solo con ver su piscina infinita en medio de la sabana ya te enamorarás. Es uno de los mejores alojamientos de la zona, ya que desde tu propia terraza estarás viendo a los animales pasear por la sabana. Podrás elegir entre diferentes villas, pero todas tienen aseguradas las mejores vistas del Serengeti.

Te aconsejamos que acabes tus vacaciones descansando en la isla de Zanzíbar, conocida como la “isla de las especias”. Es famosa por sus playas cristalinas y el patrimonio histórico y cultural del siglo VI. Después de unos días descubriendo la sabana toca descansar, tumbarse y bucear por este paraíso azul.

Si te has quedado con ganas de vivir todas estas aventuras, no dudes en contactar con nosotros y organizaremos tu viaje a medida a Tanzania.

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